El Departamento de Trabajo de EE.UU. introduce una nueva normativa de clasificación laboral

Controversias en torno a la determinación de la condición de empleado o contratista independiente

El 9 de enero de 2024, el Departamento de Trabajo de EE.UU. anunció una nueva norma que modifica las directrices para determinar la clasificación de empleado o contratista independiente según la Ley de Normas Razonables de Trabajo (FLSA). Esta norma, que entrará en vigencia el 11 de marzo de 2024, busca establecer un análisis más consistente con la FLSA, basado en la interpretación de precedentes judiciales de larga data.

El Departamento de Trabajo subraya que la clasificación errónea de empleados como contratistas independientes puede llevar a la negación de derechos fundamentales como el salario mínimo, el pago de horas extraordinarias y otras protecciones laborales. Estos motivos respaldan la implementación de la nueva norma.

Sin embargo, esta nueva norma establecida por el Departamento de Trabajo, ha atraído fuertes críticas por parte de la Asociación Americana de Camioneros. En un comunicado, Chris Spear, el CEO de la asociación ha expresado su desacuerdo estableciendo que esta restricción por parte del gobierno es considerada como un acto contrario a los principios estadounidenses. Añade que la flexibilidad y oportunidades económicas que ofrece la elección de laborar como contratista, han sido fundamentales para empoderar a minorías e inmigrantes, permitiéndoles gestionar su propio negocio y elegir sus horarios y rutas.

Spear finaliza su declaración, haciendo hincapié en que la Asociación Americana de Camioneros buscará apoyo y solidaridad en los miembros del Congreso y otras partes interesadas para lograr eliminar la norma establecida por el Departamento de Trabajo.

Julie Su, Secretaria de Trabajo en funciones, aborda la norma desde una perspectiva diferente. Señala que la clasificación incorrecta de empleados como contratistas independientes representa un problema grave, privando a los trabajadores de derechos y protecciones esenciales. Afirma que la nueva norma tiene como objetivo proteger a los trabajadores, especialmente a aquellos en mayor riesgo de explotación, asegurando una clasificación adecuada y el pago justo de salarios.

La norma aborda seis factores clave para analizar la relación entre un trabajador y un empleador: la oportunidad de beneficio o pérdida para el trabajador, la participación financiera y los recursos invertidos en el trabajo, la duración de la relación laboral, el control del empleador sobre el trabajo, la esencialidad del trabajo para el negocio y los aspectos relacionados con la habilidad e iniciativa del trabajador.

Según un comunicado del Departamento de Trabajo, con esta nueva norma se tiene el objetivo de preservar los derechos fundamentales de los trabajadores y brindar coherencia a las entidades reguladas por la Ley de Normas Laborales Justas. Asegura que se analizarán todos los factores relevantes para determinar si un trabajador debe ser clasificado como empleado o contratista independiente.