Llame al (888) 572-7520 para hablar con un agente

París no solo figura como un epicentro cultural y artístico, sino también como un pionero en las carreras de automóviles

En la historia del automovilismo, París no solo figura como un epicentro cultural y artístico, sino también como un pionero en las carreras de automóviles. Aunque podría sorprender que los franceses sean conocidos por su pasión por el automovilismo, la verdad es que Francia desempeñó un papel fundamental en el desarrollo temprano de este deporte.

Todo comenzó en el invierno de 1894, cuando el director del diario parisino Le Petit Journal ideó una competencia revolucionaria: la primera carrera de automóviles de la historia. Con un premio tentador de 10,000 francos, el concurso atrajo a 26 valientes competidores, incluidos fabricantes renombrados como Panhard et Levassor y una pequeña empresa llamada Peugeot.

Estos primeros automóviles desafiaron las calles de París en una serie de vueltas clasificatorias que capturaron la imaginación del público. El evento, originalmente planeado para recorrer 78 millas a lo largo del río Sena hasta Rouen, se transformó en una celebración de la ingeniería francesa y una exhibición de la incipiente tecnología automovilística.

The story of the first car race in Paris: a historic hit in 1894
Public domain, via Wikimedia Commons

Punto culminante: la carrera oficial en Porte Maillot

Aunque la competencia comenzó con 26 coches, los cuales tenían una velocidad aproximada de 10 millas por hora, varios competidores fueron eliminados antes de la gran carrera. Después del primer recorrido, cada día, un grupo de corredores exploraba un barrio diferente de París. El evento se popularizó rápidamente de boca en boca, atrayendo a cada vez más espectadores que se congregaban para presenciar las máquinas corriendo por las calles de la ciudad.

El punto culminante llegó el domingo 22 de julio de 1895, cuando los 21 vehículos que sobrevivieron las primeras vueltas, se alinearon en Porte Maillot para el inicio oficial de la carrera. El recorrido, que incluyó paradas estratégicas para un lujoso almuerzo y ajustes técnicos en los vehículos, puso a prueba tanto la resistencia de los pilotos como la fiabilidad de sus máquinas.

En un final dramático, el tractor a vapor del Conde de Dion, conocido por su potencia y robustez, cruzó la línea de meta en Rouen en primer lugar. Sin embargo, debido a una regla impuesta por el editor Giffard para promover la autonomía de los automóviles, el Conde fue descalificado por tener mecánicos a bordo. Así, el honor de ser reconocido como el ganador oficial recayó en Albert Lemaître de Peugeot, quien llegó en segundo lugar sin incumplir las reglas establecidas.

Este evento no solo marcó el inicio oficial de las carreras de automóviles organizadas, sino que también demostró al mundo la creciente capacidad de los automóviles para competir y sobresalir en desafíos exigentes. Desde entonces, Francia ha continuado siendo un bastión del automovilismo, con eventos icónicos como las 24 Horas de Le Mans, perpetuando su legado como una potencia global en este apasionante deporte.

The story of the first car race in Paris: a historic hit in 1894
R.Girard, Public domain, via Wikimedia Commons
Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Business hours: Monday to Friday from 8:00 AM to 5:00 PM. California time
Leave your number and a member of our company will contact you
Horario de atención: Lunes a viernes de 8.00 AM a 5.00 PM. Hora california

Deje su número y un miembro de nuestra empresa se pondrá en contacto con usted